El juego está hecho de solo nueve fichas cuadradas, que representan partes de un mapa. Cada ficha tiene una zona de tierra y una zona de agua. Un jugador intenta conectar zonas terrestres, el otro zonas de agua. Cada turno tienen que decidir si quieren rotar una ficha o colocar una nueva. Cuando se completa el mapa, gana el jugador que conectó la mayoría de las zonas.